La ilusión no se para, Edificio Soleo.
Hola, ya sabéis las circunstancias que nos toca vivir, insolitas e inesperadas desde luego. A nuestra manera queremos enviaros un mensaje de ánimo, la pandemia ha coincidido con el final de la construcción del Edificio Soleo y no queremos que la ilusión decaiga.
LA ILUSION NO SE PARA. Somos una sociedad fuerte, muy avanzada tecnologicamente y con una capacidad de respuesta nunca vista a lo largo de nuestra existencia. Jamás hemos tenido tantos medios y conocimiento para afrontar el futuro.
Estamos todos juntos y juntos vamos a superar este bache. Podéis estar tranquilos, el edificio está terminado a falta de remates y solo hace falta que se levante el estado de alarma para que podáis visitar vuestras viviendas, darles el visto bueno y habitarlas. Hoy mas que nunca hay que acordarse de los profesionales que han trabajado en nuestro, vuestro edificio.
Seguimos trabajando, desde casa, pero trabajando. Las notarias y registros de la propiedad están activos y hemos adelantado la escritura de división horizontal con las normas de comunidad a fin de que sean revisadas y el trámite de inscripcción mas agíl. No me cabe la menor duda de que los servicios urbanísticos del Ayuntamiento de Oviedo van a colaborar en acelerar, en la medida de lo posible, los últimos trámites. Entre tanto, una vez se levante el estado de alarma, os daremos acceso a las llaves para que podáis ir amueblando vuestas viviendas. Estamos haciendo todo lo que está en nuestras manos para que el despegue sea rápido y ágil.
Mirando las fotografías de este blog, he descubierto que relata muy bien en el tiempo la construcción del Edificio Soleo, hay mucho trabajo realizado y me llena de orgullo el buen hacer de todos los equipos que han participado en la construcción del edificio.
Todo empezó con un punto azul, a que parece increible. Desde aquí se han tomado las primeras referencias. Lo fuimos trasladando y ramificando en los cimientos, pilares, tabiquería, niveles etc.
Un punto, una maquina excavadora y unos camiones, hicimos un agujero de mil demonios, dos sótanos con 68 plazas de garajes y trasteros. Muchos m3 de tierra.
Desde esta altura parece pequeño… tambien a Jorge (4 años) la luna le parece pequeñita, lo que hace la distancia. Es un gran solar, bueno era, ahora es un edificio de 9 plantas incluyendo la baja. 7.440 m2 construidos.
Que bien se nos dió la cimentación y muros perimetrales. El terreno se comportó (por una vez) mejor de lo previsto. Un trabajo duro y contrareloj, contar con los mejores profesionales fué fundamental. Un gran acierto de Ignacio instalar primero la grua torre que tan buen servicio dió a la obra. A todos (menos al calculista) nos sorprendieron las dimensiones de las zapatas sobre las que se descargan todas las fuerzas del edifcio, claro cuando vimos la dimensión en hormigón que alcanzaba entendimos…
Salimos de cimentación y para arriba. La losa de hormigón, muy laboriosa e intensa en mano de obra dió mucho trabajo, pero sus propiedades son excelentes, a nivel acústico, hidrófugo y de aislamiento térmico. Mereció la pena el trabajo. Esta imagen que fusiona la distribución sobre la losa ejecutada fué una de las mas visitadas en el blog. A muchos les ayudó a visualizar su vivienda.
Edificio Soleo es duro, las primeras imágenes descubrieron la solided del sistema y la arquitectura diseñada. Estos antepechos de hormigón con descuelgues. Cuando en una reunión de arquitectos les enseñé estas imágenes causamos admiración, por no tratarnos de locos. El coste de estos elementos es importante y solo se usan en obra pública. Nosotros primamos el diseño y la eficiencia energética que aportan a las viviendas sobre los aspectos mas económicos. Esto es calidad real, sin artificios.
Cuando nos dimos cuenta teníamos en obra un montón de oficios. los espacios tomaron relevancia, visualizamos los patios, zonas comunes y sobre todo las terrazas. Si, aquellas que parecían pequeñas y oscuras. ¡¡Como ha cambiado todo con los acabados!!
Aparecieron los primeros inquilinos, el gruista muy preocupado por su evolución se interesó por su superviviencia y nacieron los polluelos del colirrojo.
Y mientras trabajamos en las fachadas, el interior salió a la luz (nunca mejor dicho) y aquella obra gris tomó luminosidad. Un gran trabajo de los compradores escogiendo los acabados interiores, alicatados de baños y mobiliario de cocina. En esta etapa la obra fué un misterio, solo tomaba protagonismo cuando al atardecer entrabas en Oviedo por la autopista, con el naranja de los andamios y la luz de fondo… cambiamos el perfíl de de la ciudad.
Quitamos los andamios y… bueno, las espectativas se dispararon. Vaya sorpresa. Las infografías de la fachada quedaron en el olvido, como siempre, la realidad es mucho mejor. Y es que no hay un desplome… acordaros del punto azul del principio, todo esta relacionado, bueno, y el gran trabajo de Bautista como encargado de obra, no se le escapa una.
Que nos queda por hacer, pues poca cosa. El último dia de trabajo estabamos colocando los cristales del portal y rematando el suelo. Teníamos programado para el lunes el suelo de los garajes y de los soportales, ya están dados los caidos y ejecutadas las impermeabilizaciones. El pasado domingo nos desplazamos hasta el edificio para reforzar los cierres de la obra y ultimar los sistemas de seguridad. Periodicamente visitamos la obra y verificamos el correcto funcionamiento de los sistemas.
No sé cuanto durará el confinamiento, quizas podamos retomar la obra el próximo dia 13 o estaremos una semana mas parados, no creo que se alarge mucho mas, los últimos datos son buenos y disminuye el número de contagio que desestabilizan el sistema sanitario.
Hoy nuestro pensamiento tiene que estar con las personas mayores y los profesionales que están en primera línea, y sí Mirian, te vas a casar en agosto y te vamos a entregar la vivienda, seguro.
Gracias a todos, un saludo y ánimo.
